El experimento de Milgram

¿ Qué es?

Es un experimento que se encuentra en la rama de la psicología llamada "psicología experimental". Esta rama es la más científica ya que contiene mucha estadística y que los resultados de los experimentos se deben publicar en lenguaje matemático, a menudo en forma de porcentaje.

Para realizar un experimento psicológico se deben cumplir ciertos pasos: poner un nombre al experimento, saber exactamente cuál es el objetivo, decidir un líder y sus ayudantes, apuntar el medio y material necesario así como los sujetos del experimento (señalando el sexo y la edad), apuntar el resultado del experimento y concluir elaborando una reflexión personal. El orden de los pasos es orientativo, puede variar.


Origen

Milgram era un psicólogo social que cobró fama trás su experimento.
Adolf Eichmann era un hombre que actuaba como Adolf Hitler, perpetuando sus mismos actos. Las autoridades quisieron pararlo pero se fugó a Sudamérica donde fue finalmete capturado. Tendría que pasar por un juicio llamado Juicio de Jerusalem, al cuál asistió nuestro psicólogo Milgram.

Durante el juicio, al acusado no reconoce sus actos sino que los justifica diciendo que solo cumplía órdenes siguiendo la ética del deber de Kant.

La gente presente al juicio se indignó ante tal declaración, reclamando justícia. Pero Milgram se cuestionó la veracidad de sus afirmaciones: ¿Y si Eichmann no estaba fabulando excusas sino que realmente se creía lo que estaba afirmando? Trás esa reflexión diseñó su famoso experimento.


Desarollo   

Se reclutaron 40 sujetos (hombres) por correo y por un anuncio en el periódico. Creían que iban a participar en un experimento sobre la "memoria y el aprendizaje". Se le informó claramente a cada sujeto que se le iba a pagar por ir y que conservaría el pago "independientemente de lo que pasara después de su llegada".

Luego, el sujeto conoció a un "experimentador", la persona que dirigía el experimento, la autoridad científica ,y a otra persona que se la indicó como otro sujeto. El otro sujeto era en realidad un cómplice que actuó como sujeto.Los dos sujetos (el sujeto verdadero y el cómplice) sacaron un papel para saber quién iba a ser un "maestro" y quién un "aprendiz". El sorteo fue falso, ya que el sujeto verdadero siempre obtendría el papel de "maestro".

Bien, el experimento consistía en que el aprendiz se tenía que aprender de memoria una lista (de palabras por ejemplo). Una vez memorizada la tenía que recitar al maestro. Por cada fallo, una descarga eléctica que aumentaría a cada error. Antes de empezar el experimento, el maestro vió que el aprendiz estaba atado a una silla y tenía electrodos. Luego, el sujeto fue ubicado en otra habitación delante del generador de descarga, sin poder ver al aprendiz, pero sí pudiéndolo escuchar.

El experimento llamado "Sumisión frente a la autoridad" estaba diseñado para contestar a la pregunta:"¿Cuánto tiempo puede alguien seguir dando descargas a otra persona si se le dice que lo haga, incluso si creyera que se le pueden causar heridas graves?"
Efectivamente, el aprendiz ( o sujeto cómplice) no estaba realmente conectado a los electrodos, pero tenía que fingir dolor y gritos incluso problemas cardíacos para ver si el maestro pararía de administrarle voltios o si seguiría sabiendo que le estaba haciendo daño, solo porque se lo dice la autoridad cientifica.


Resultado

Antes del experimento de Stanley Milgram, los expertos pensaban que aproximadamente el 1-3% de los sujetos no dejaría de realizar las descargas. Creían que tendrías que ser morboso o psicópata para hacerlo. Sin embargo, el 65% no dejó de realizar las descargas. Ninguno se detuvo cuando el aprendiz dijo que tenía problemas cardíacos.

Aunque algunos se resistían, es decir les decía al experimentador que no querian seguir con eso, al contestarles afirmaciones como, "El experimento necesita que usted siga", "Es absolutamente esencial que continúe ", "No tiene otra opción, debe continuar", el sujeto seguía. Si decian que no querian ser responsable de cualquier cosa que le pasara al aprendiz y por lo tanto no querian seguir, el experimentador respondía: "Yo soy responsable". Esto brindaba alivio al sujeto y así muchos continuaban.

De las 40 personas del experimento, la totalidad llegó a los 300 voltios y de ellos, 25 llegaron al nivel máximo de voltios, es decir, 400 (de haber estado realmente conectado a los electrodos, el sujeto hubiera muerto). Estos resultados dió peso a la hipótesis de Milgram, muchos de nosotros hubiéramos actuado igual que los alemanes en la 2a Guerra Mundial, aún sabiendo que no es correcto lo que hacemos, o como Eichmann, siguiendo sus creencias.

Mi reflexión personal

Me parece aberrante tal resultado, sobretodo sabiendo que el voltaje máximo que puede soportar normalmente un cuerpo humano es de 220-250 voltios. Saber que la totalidad de las personas llegó a los 300 me deja sin palabras y pensar que 25, es decir, más de la mitad, llegó a los 400 tampoco tiene una explicación racional.

Me sorpende que hayan seguido seguramente porqué el que daba las órdenes fuera una autoridad científica y por lo tanto sabía supuestamente más que ellos. ¿Por qué al haber hecho el experimento con hombres en igualdad de condiciones no hubiera dado los mismos resultados? La responsabilidad es la misma, pensar lo contrario es engañarse. También me alerta el hecho de que no pensaran en que al igual que les ha tocado maestro les podría (supuestamente) haber tocado aprendiz y ser ellos los que sufren las descargas. O que lo hayan pensado y aún así no hacer nada, no sé que es peor. También me impactó el hecho que al realizar un experimento muy similar con monos, dió el resultado opuesto. ¿Y luego se dice que la especie humana es la más desenvolupada, la que tiene más capacidad para razonar? El experimento demuestra lo contrario. Creo que deberíamos ser conscientes de nuestros actos y sobretodo, asumirlos. No echarle la culpa al experimentador para tener la consciencia tranquila sino tener bien en mente que fuiste tú quien le administró las descargas que encadenaron su muerte. Aprender a pensar por uno mismo, cuestionarnos lo que nos han enseñado y no aprenderlo porque te dicen que es así y punto. No hacer algo que está "bien" si tus valores y tu moral te dicen lo contrario, en el caso del experimento.

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